Colegio Imperial de Madrid. Provincia de Toledo. Asistencia de España.
Plano parcial: los sitios escolares
Sin ninguna indicación de lugar. Escala geométrica en pies geométrico 1-16. A la izquierda se percibe el perfil de lado derecho iglesia ya edificada, pintado de amarillo, color con que se señalan en el plano las partes ya construidas, mientras que el color rojo se emplea para indicar las que faltan por construir. Por detrás del ábside de la iglesia se ve parte del llamado “quarto viejo”. Por delante del templo y del colegio nuevo pasa la Calle de Toledo y, formando con ella un ángulo obtuso la Calle de San Dámaso (actualmente “calle de los Estudios”), lo que ha permitido localizar el plano en Madrid. Además de la iglesia ya están construidas, al señalarlas en color amarillo, mirando hacia la calle de San Dámaso, las clases de retórica y cronología, las de retórica correspondientes a los grados de medianos y remínimos, y, dentro del patio de escuelas la Capilla de la Congregación, la cual consta documentalmente que se levantó entre 1602-1620. Faltan, en cambio, por edificar las clases de menores, menores y mínimos, así como las matemáticas y theología redondeando el dicho patio de escuelas. También están por edificar todo el Patio Principal, la portada, portería, locutorios y escalera y tiendas de libreros que caen, éstas, a la calle de Toledo, pues va todo ello subrayado en rojo. Comenzó a construirse esta zona, la más importante del colegio, en 1683 posiblemente con trazas del H. Francisco Bautista, encargándose de la construcción José del Olmo y Melchor de Bueras entre otros.
Historia: En 1660 la Compañía de Jesús se estableció en Madrid en unas casas y terrenos que recibió de doña Leonor de Mascareñas. Siete años después se puso la primera piedra para la primitiva iglesia que trazó el P. Bustamante. De 1596 a 1601 se renueva y amplía la construcción con lo que se conocía como “quarto viejo”, que daba a la calle de la Concepción Jerónima, hoy Colegiata. Después de la generosa fundación otorgada en su testamento por la emperatriz María de Austria (+1603), el colegio comienzo a denominarse Colegio Imperial. En 1629 en rey Felipe IV establece en él los “Estudios Reales”, aprobados por el Padre General Muzio Vitelleschi, que consistían en una serie de cátedras de enseñanza universitaria. En 1626 de había comenzado a construir una iglesia monumental conforme a la traza del H. Pedro Sánchez, trasladado a Madrid por orden del conde-duque de Olivares, continuada después por el Hermano Francisco Bautista, y que fue consagrada en 1655. Una vez acaba ésta, fue necesario transformar por completo el sitio destinado al colegio y escuelas, cuyos trabajos no finalizaron hasta 1682, levantándose entonces el claustro, puerta principal y escalera, destinados a la comunidad docente, mientras alrededor de otro patio contiguo se encontraban las aulas y la capilla de los seglares dedicada a la Inmaculada Concepción. La iglesia es actualmente Colegiata de San Isidro Labrador y el colegio Instituto de Enseñanza Media.
Sí, en castellano.
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Rodríguez G. de Ceballos, A., Bartolomé de Bustamante y los orígenes de la arquitectura jesuítica en España, Roma, Institutum Historicum S.I., 1967, pp. 225-240.
Rodríguez G. de Ceballos, A., “El Colegio Imperial de Madrid. Historia de su construcción”, Miscelanea Comillas, 54 (1970), pp. 407-444.
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